La foliculitis y la depilación láser

La depilación láser es la técnica más eficiente para retirar el vello del cuerpo y cantidad de usuarios se interesan por este método cada año. Entre sus beneficios destaca su comodidad, pues se trata de una técnica indolora, pero también su capacidad de aplicación en todo tipo de pieles. Esto incluye también a las afectadas por la foliculitis, ya que puede minimizar considerablemente los efectos de esta afección tan molesta.

A continuación, te lo contamos todo sobre la foliculitis y la depilación láser y te mostramos cómo las técnicas de depilación láser definitiva pueden ayudarte a combatirla.

¿Qué es la foliculitis? 

La foliculitis es una afección de la piel muy habitual que afecta a un gran número de personas. Se trata de la inflación de los folículos pilosos, habitualmente causada por algún tipo de bacteria. Destaca por crear unos pequeños bultos, similares a las espinillas, alrededor de los diminutos huecos por los que crece el vello.

Si esta inflamación evoluciona puede llegar a generar molestias como la irritación o la picazón. También puede extenderse por la piel y generar llagas o, en casos más extremos, incluso costras.

No obstante, si aparece una foliculitis leve y la piel se cuida debidamente, esta suele desaparecer en muy pocos días sin dejar rastro. Por otro lado, en los casos más agresivos, puede llegar a necesitar un tratamiento médico con fármacos.

Los síntomas de la foliculitis

Las personas con foliculitis van a experimentar los siguientes síntomas:

• Bultos de pequeño tamaño o granos alrededor del nacimiento del vello en cualquier parte del cuerpo.
• Ampollas que contienen pus y que se rompen dando lugar a costras pequeñas.
• Sensación de ardor y de picor en la piel.
• Bultos que están infamados.
• Piel que se siente dolorida y que tiene sensibilidad.

Los diferentes tipos de foliculitis

Según las causas, síntomas y gravedad de la afección podremos enfrentarnos a diferentes tipos de foliculitis. Estos son los más comunes:

• Foliculitis bacteriana. Se trata de la forma más común de la foliculitis. Ocurre cuando las bacterias conocidas como Staphylococcus aureus (estafilococo), presentes de forma natural en nuestra piel, acceden al interior por un pequeño corte o fisura y producen una infección.
• Foliculitis por pseudomonas. Destaca por la aparición de varios bultos en forma de sarpullido que producen picor y que tardan hasta dos días en manifestarse tras la exposición a la bacteria responsable de su aparición. Son bacterias que se encuentran en piscinas, baños de hidromasaje o jacuzzi que no presentan los índices de pH y cloro adecuados.
• Pseudofoliculitis de la barba. Es el resultado de los vellos encarnados por un proceso de rasuración, especialmente en las personas con el cabello rizado. No causan una inflamación de los folículos pilosos, pero sus síntomas son muy similares. Es común que aparezca en el rostro o en la zona de la ingle.
• Foliculitis por Pityrosporum. Se trata de una de las formas más agresivas de foliculitis, pues aparece con bultos de pus que causan picores y son bastante molestos. Habitualmente, surge en la zona de la espalda o del pecho y se debe a una candidiasis.
• Foliculitis gramnegativa. Tiene un aspecto muy similar a la anterior, sin embargo, los bultos con pus aparecen junto a la nariz o la boca. Es común en las personas que han recibido un tratamiento para combatir el acné facial con antibióticos a largo plazo.
• Foliculitis eosinofílica. Es una afección de entre las más molestas e invasivas. En este caso se manifiesta con un intenso picor, creación de bultos, machas o granos cerca de los folículos pilosos, tanto en el cuello como en el rostro. Aparece en pacientes debilitados por una enfermedad del sistema inmunológico, como el VIH, y se desconoce su causa.
• Forúnculos (diviesos) y carbuncos. Causada por bacterias de tipo estafilocócico, este tipo de foliculitis aparece con bultos que están visiblemente inflamados y que causan dolor. Aparece de manera repentina, con un tamaño mayor al de otras variantes y es especialmente doloroso para el paciente.

¿Por qué aparece la foliculitis? 

La foliculitis puede aparecer por diferentes causas, siendo la principal de ellas el contacto de la piel con bacterias. La bacteria denominada Staphylococcus aureus (estafilococos) es la que suele generar esta patología. Además, se puede desarrollar la foliculitis en algunos casos por la aparición de hongos, virus, parásitos, lesiones físicas o determinados medicamentos.

Pese a que todo tipo de personas pueden verse afectadas por este problema, hay determinados factores de riesgo que hacen a algunos pacientes más propensos a desarrollarla por sus hábitos o condición de salud. Se trata de los siguientes condicionantes:

• El uso habitual de ropa que no permite una buena transpiración y hace que se acumule el sudor, que este se quede pegado a la piel.
• Los baños públicos, piscinas o bañeras de hidromasaje que no tienen un mantenimiento e higiene adecuados.
• Daños o lesiones en los folículos pilosos causados por la depuración con métodos tradicionales, el afeitado o las prendas de ropa muy ajustadas.
• El uso de algunos medicamentos que contienen cortisona, tratamientos para el acné a largo plazo o sesiones de quimioterapia.
• Afecciones que minimizan la resistencia a las infecciones como son la Diabetes, VIH o SIDA.
• El exceso de sudoración o la dermatitis.

Para evitar que se desarrolle una foliculitis en la medida de lo posible, es importante mantener una buena higiene y emplear la ropa adecuada, cómoda y que permita la transpiración.

Reducir los problemas de foliculitis con la depilación láser 

La depilación láser puede ser un excelente tratamiento para la foliculitis, especialmente cuando esta se está volviendo más severa y los tratamientos básicos, como la higiene personal, no están arrojando buenos resultados. Además, es posible hacer una depilación láser completa que llegue a todas las partes del cuerpo, incluso en las ingles, por lo que cualquier zona afectada puede presentar mejoría con este tratamiento.

Esta técnica emplea el impacto de la luz que se aplica directamente sobre la dermis para hacer que desaparezca de manera instantánea e indolora el vello. Por lo tanto, en la zona en la que se aplique, se verá cómo también se retira cualquier imperfección, irritación o vello enquistado. Desde la primera sesión se puede observar cómo desaparecen los pequeños bultos tan característicos de la foliculitis.

La depilación láser de piernas es muy efectiva para tratar esta patología, pues es un área que se suele depilar con métodos tradicionales, como las cuchillas, y estas pueden generar daños que son causantes de la inflamación.

El láser de axilas y el láser de ingles son muy utilizados para combatir la patología generada por el cúmulo de sudor o la falta de transpiración en esas zonas. Por otro lado, las personas que se ven afectadas por la foliculitis tras un tratamiento para el acné verán resultados positivos aplicando la depilación láser facial. En algunos casos, especialmente en los usuarios masculinos, puede ser necesario aplicar el láser de espalda cuando existe una cantidad de vello abundante y se enquista.

El tratamiento es muy eficiente y, actualmente, ofrece tarifas accesibles. En Grupostop encontrarás ofertas de láser para hacer sesiones completas que se ajustan a tus necesidades y que son aplicadas por profesionales expertos en esta técnica.

Prevención de la foliculitis

Prevenir la foliculitis es posible si se siguen algunos buenos hábitos de higiene personal y cuidados. Estos son algunos consejos para evitar esta afección de la piel:

• Limpieza de la piel. Una buena higiene de la piel regularmente y evitando compartir las toallas u otros productos que tengan contacto con la dermis.
• Limpieza de la ropa. Limpiar correctamente las prendas de ropa o textiles, como toallas, que se han manchado con aceites u otros elementos.
• Evitar la presión. Evitar las prendas de ropa demasiado ajustadas a la piel que puedan causar una foliculitis, incluso accesorios como las mochilas o los cascos.
• Evitar rasuraciones. Evitar el uso de cuchillas para depilar o para cortar la barba. Si es necesario, conviene dejar la barba crecer para evitar complicaciones.
• Tratamiento de otras afecciones. Es imprescindible tratar las afecciones que pueden estar relacionadas con esta patología, por ejemplo, la hiperhidrosis.
• Piscinas y spas limpios. Acude a piscinas, jacuzzis o spas con buena higiene. Tras acudir a estos espacios, es recomendable retirar el traje de baño inmediatamente y limpiarse con agua y jabón.

Si resulta inevitable el afeitado o la rasuración, se pueden minimizar los riesgos de desarrollar foliculitis con estas medidas preventivas:

• Realizar el afeitado con menos frecuencia.
• Lavar a conciencia la piel con agua y jabón antes de rasurar.
• Aplicar una toalla o paño con agua caliente sobre la zona, haciendo movimientos circulares, antes de proceder a la rasuración. Esto hace que los vellos se eleven y reduce la posibilidad de enquistamiento.
• La cuchilla debe estar perfectamente higienizada y afilada antes de aplicarla sobre la piel. Después de cada procedimiento, se debe limpiar de nuevo con agua y jabón.
• Procurar pasar por la misma zona solo una o dos veces con la cuchilla para evitar daños o irritaciones.
• Emplear una loción especial para después del afeitado.
• No compartir los utensilios empleados para la rasuración con otras personas.